El año nuevo nos viene
como un tigre enfurecido
con las garras afiladas
y mostrando los colmillos.
El año nuevo lo encargan
como engendro mal parido
con la cara deformada
y miseria en sus bolsillos.
Lo quieren el año nuevo
con horchata en los sentidos
sin piedad para los pobres
y colmado para el rico.
La crisis la tapadera
del que obtiene beneficio
y se burla de los pobres
que se comen los ladrillos.
Y ¡ole! los coches de lujo
y al pobre alambre de espino.
Y ¡ole! la gran opulencia
y al pobre más de lo mismo.
Qué pena que no reaccionen
los que pasan sin sentirlo
qué pena que no se enteren
que hay niños que pasan frío.
Qué pena, penita, pena
no tener siendo tantísimos
el valor de sanear
todo lo que está podrido.
Que el año nuevo no tiene
escasez de leche y trigo
la miseria está en aquellos
que acaparan sin sentido.
Recibamos pues al año
con valor estando unidos
y cambiemos de raíz
todo lo que está maldito.
AMIGOS Y AMIGAS, ¡FELIZ AÑO!, EN LA ESPERA DE LO NUEVO.
Antonio Capilla Loma, 31-12-2022