Cruzan veloces las luces a lo lejos.
Es nuestra la noche, distante,
fría como un hierro,
erguida sobre un yelmo
que oscuro resplandece en el cielo.
Tantas veces presiento tus ojos,
esa mirada abierta oferente a mi voz,
esperando tendida al resto de mi cuerpo
mientras soy una isla, un pájaro, un árbol.
Oigo el murmullo,
siento en el viento la ausencia,
crecida como un río me emanas muy adentro,
siempre dispuesta a llenar mi silencio.
Fernando Sarría
Corren las nubes como aviones sin rumbo buscando
[el Este.
Nacen del océano y se asoman a la urdimbre de los
[ríos,
al silencio de las montañas,
a las luces y sueños de las ciudades habitadas por la
[noche.
Yo viajo por Europa en la oscuridad de tu cuerpo
y tengo mi boca entre tus pechos,
en la semilla de tu respiración,
encarnado en un pájaro solitario
que ronda esa isla donde tu corazón me espera.
Fernando Sarría
FERNANDO SARRÍA
Gracias Antonio...un abrazo
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte, amigo.
ResponderEliminarGrande, Fernando Sarría y grande, tú, Antonio!
ResponderEliminarGracias, Fran. Tú sabes que cuentas con mi aprecio como persona y como poeta. Un abrazo.
ResponderEliminarFernando Sarria, es una voz que sobresale en los blogs.
ResponderEliminarFelicidades para ambos y besos
No conocía a Fernando Sarriá. Gracias por traerlo. Un placer leerte y leerle.
ResponderEliminarUn abrazo Antonio
Gracias, Rosa. Encantado de haberte dado a conocer a este amigo y poeta. Yo también gozo con tu poesía. Un beso.
ResponderEliminar